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13 oct 2009

Escuela Nueva
Construyendo opciones para mejorar la calidad de vida de las comunidades rurales
Escuela Nueva
El proyecto Escuela Nueva tiene como propósito fortalecer la Educación Rural en los cinco grados de educación básica primaria. Consiste en la introducción de una metodología activa, constructiva, llamada “Escuela Nueva” en todas las áreas del currículo.
Posteriormente se anexa a este sistema la Post-Primaria.
Promueve la formación de un nuevo maestro con apertura y compromiso de cambio, creativo, interrelacionado con la comunidad, un nuevo estudiante con capacidad de liderazgo, creativo y autónomo, una nueva escuela que rompe esquemas tradicionales de enseñanza y una nueva comunidad comprometida con su escuela y su región.


Principios
Los principios sobre los cuales se basa la metodología Escuela Nueva son:
• El niño se constituye en el centro de los procesos de enseñanza-aprendizaje.
• El niño construye su propio conocimiento, aprovechando el trabajo en equipo y la flexibilidad de los programas, de acuerdo con el cumplimiento de metas y objetivos.
• Maestros con actitud abierta y positiva y orientadores de procesos de aprendizaje de los estudiantes.
• Los aprendizajes se obtiene a través del trabajo con material autoinstrucción (guías de aprendizaje) que contiene actividades y ejercicios graduales y secuenciales, las cuales facilitan el auto aprendizaje, tanto individual como grupal.
• El manejo de materiales y recursos de aprendizaje (Centros de Recursos de Aprendizaje), promueve en el e niño el uso de su iniciativa, creatividad e incorpora a su actividad pedagógica, los materiales, las situaciones y sucesos del entorno.
• Flexibilidad en el desarrollo, de los procesos curriculares de tal forma que el niño pueda avanzar a su propio ritmo de aprendizaje.
• Vinculación real de la escuela con la comunidad en donde el compromiso e interacción que se establece entre familia y escuela, permite una vinculación permanente de los miembros de la familia al proceso de aprendizaje del niño, una mayor valoración de su educación y la participación en proyectos comunes que responden a sus necesidades.
• El Gobierno Estudiantil como estrategia que garantiza la participación activa de los niños en la vida democrática de la escuela, fortaleciendo valores como la convivencia, la solidaridad, la cooperación, el respeto mutuo y el trabajo colectivo.

EL DECRETO 1290 Y LA ESCUELA NUEVA.
Antes de indagar por la relación entre Escuela Nueva y el decreto 1290, así como los retos que éste nos pone, creo que sería bueno hablar inicialmente de cómo es la evaluación en Escuela Nueva. Creo que los docentes pueden tener muchas preguntas y experiencias de cómo manejan el tema de la evaluación en Escuela Nueva. Invito a todos estos educadores para que utilicen los encuentros con ese propósito. Hay varias cosas sobre las que podrían opinar… por ejemplo…

1. ¿Cómo manejar la autoevaluación, la coevaluación y la heteroevaluación en el aula?
2. ¿Cómo aprovechar el cuadro de control de progreso y no tomarlo solamente para “chulear” unas actividades realizadas?
3. ¿Cómo utilizar los diferentes instrumentos el modelo Escuela Nueva para evaluar permanente e integralmente a los estudiantes?
4. ¿Cómo se planea la evaluación? ¿Desde antes de planear las clases y las unidades o al final de éstas de manera improvisada o tradicional para verificar unos determinados desempeños?
5. ¿Cómo evaluar integralmente a los estudiantes tanto en su desarrollo cognitivo como también afectivo, artístico, moral, etc.?

Todos estos cuestionamientos, con la participación de muchos, pueden ayudarnos a despojar dudas y compartir experiencias…

Y esto será un excelente insumo para comprender la evaluación que nos propone el decreto 1290.

COMENTARIOS:
De lo anterior podemos concluir que la escuela nueva, a pesar de ser del carácter formal, es una metodología alternativa.
Pero no es el caso de Escuela Nueva. Quizás el mayor mérito y el elemento más inspirador de Escuela Nueva consista, precisamente, en que no se trata de una alternativa a la educación formal ni a la educación estatal sino de una alternativa dentro de los parámetros de la educación formal y la educación pública.
La evaluación y la promoción se apartan sustancialmente de los parámetros de la escuela convencional. La evaluación es parte del proceso de aprendizaje, y su función principal es advertir a maestros y alumnos acerca de lo que requiere refuerzo. La promoción a objetivos o grados siguientes es flexible (no automática). Cada niño es promovido al nivel siguiente cuando cumple con los objetivos educativos establecidos, lo que puede tomar más (o menos) de un año escolar regular. Es, pues, la escuela la que se ajusta a los calendarios y necesidades de los niños y de sus familias, y no a la inversa. Si un niño se ausenta temporalmente, puede retomar el estudio sin tener que retirarse de la escuela.
Desde el modelo Escuela Nueva, no podemos perder de vista que el propósito de la evaluación es enriquecer, consolidar y comprobar los aprendizajes de los estudiantes para facilitar su continuidad.
Las funciones de la evaluación son motivar, diagnosticar, orientar, guiar la administración del proceso de orientación del aprendizaje, e informar y certificar. No se trata de un control para ver si se “pasó” o se “perdió”. Desde Escuela Nueva se respetan los ritmos de aprendizaje y por ello se aplica la promoción flexible.
Es cierto cuando se comenta que el control de progreso es una herramienta para verificar, retroalimentar y registrar el avance de los estudiantes en la medida que van trabajando las actividades de la guía de aprendizaje. Sin embargo, claramente las estrategias del modelo, los tipos de evaluación que utiliza y todas las oportunidades y herramientas que se ponen al servicio de la evaluación son mucho más que el control de progreso.
El modelo es rico en las estrategias de evaluación, tipos de evaluación, generación y aprovechamiento de oportunidades y herramientas al servicio de la evaluación.
Ahora ocurre que en Escuela Nueva la promoción, al ser flexible y permitir que los estudiantes avancen según su ritmo de aprendizaje, en ningún momento se habla de “no aprobó”, sino “va en tal punto en el desarrollo de tales asignaturas y curso”. Sin embargo, nos unimos al decreto 1290 en términos de prever al final del año escolar el avance que tendrá un estudiante y garantizar su cupo en el siguiente año escolar, pero no para reprobar y mucho menos expresar con cuantas materias se pierde el año, pues esto en escuela Nueva nunca sucede.
Si una Institución Educativa, de esta modalidad, llegase a proponer y aprobar aduciendo autonomía, la pérdida del año y fijara número de áreas para ello, estaría aberrantemente pasando por encima el principio primario de este modelo, como es la promoción flexible a propio ritmo del estudiante.
Pareciera entender por lo que se expresa en algunos acuerdos de los Consejos Académicos que se está sobrepasando el modelo, y lo están llevando al modelo de escuela regular graduada, así se desprende del análisis de los planes de estudio.
Como entender que en el modelo escuela nueva, un estudiante con las dificultades sociales, topográficas, ambientales, etc., llegase a perder el año por solo perder las áreas de educación física y religión, para solo citar con respeto a estas áreas, un ejemplo.
Expreso esto por lo visualizado en la página de la IE Nueva Granda de Cartago – Valle, en donde en la diapositiva Nº 9 Criterios de Promoción 1.2.se lee textualmente: “.. será promovido un estudiante al grado inmediatamente superior, si el PROMEDIO GENERAL, al terminar el año lectivo, resulta igual o superior a 3,0, reflejando en el estudiante como mínimo, un DESEMPEÑO BASICO INTEGRAL, siempre y cuando no haya reprobado mas de dos áreas y en cuyo caso el estudiante no podrá ser promovido al año siguiente.

Otro aspecto a analizar es como se puede hacer evaluación integral, respetando singularidades, ritmos de aprendizaje, estilos, motivaciones, cuando una institución habla de promediar resultados, al decir se suman las notas definitivas de las áreas….
Me parece que se ha caído en lo más simple de la evaluación como es solo medir resultados y con ellos tomar decisiones, sobrepasando la evaluación por procesos y formativa.
Con lo anterior solo quiero plantear una discusión propositiva y futurista para que el estudiante sea el centro del propósito educativo.
Durante mi proceso en esta Institución, hoy en mi lejanía corporal, debo manifestar con sinceridad, que cometí dos errores garrafales y que motivado por esta reflexión los comento para no permitir que otros lleguen a ellos.
1º Acepté en un año que 4 niños perdieran el año.
2º Acepté pedir un libro guía, violando los principios de escuela nueva, cuando se llevan guías. A favor del modelo debo manifestar que se propuso hacer las guías de trabajo, en vista que conseguirlas era difícil presupuestalmente. El trabajo emprendido en este aspecto con docentes sostenía el principio de la escuela Nueva que es trabajar con guías y que mejor que las realizadas, pensadas y diseñadas (con sus posibles errores) por los docentes.


Carlos Humberto Hernández Hidalgo.

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